Ilustración de Violeta Monreal |
Encuentro
de Violeta Monreal con el alumnado de segundo ciclo.
Violeta
Monreal llegó a nuestra biblioteca rebosante de creatividad, entusiasmo y
dispuesta a que todos disfrutáramos; algo que realmente consiguió.
Colocó
su cartulina en un lugar visible para todos junto a su hoja de sucio,
imprescindible para que el trabajo quede limpio, puesto que, como nos hizo repetir,
“me puedo equivocar”.
Comenzó
hablándonos de tres tipos de dibujos: el clásico, el digital y el mágico, que
impregnan sus ilustraciones con su peculiar técnica de rasgar papel. Y mientras hablaba con
nosotros, como si tal cosa, iba sacando distintos tipos de cartulinas, papeles,
imágenes y pegamento para ir dándole forma a su obra. Iba recortando con las manos, haciendo composiciones
con cartulinas o papel que poco a poco y casi por arte de magia iba cobrando
sentido y dotando a la ilustración de forma, expresividad y significado.
Su
labor continua de creación la simultaneaba con la respuesta a las preguntas del
alumnado sobre su libro, su proceso de trabajo y creación y otros detalles que
iban surgiendo. Así supimos que la historia de Pamela Panamá surgió a partir de
una cajita que le regalaron y que se convirtió en protagonista, que le gustan
los sombreros y dibujos y los unió en este libro y que lo que realmente le hizo
crear el personaje fue el gusto por el trabajo bien hecho. Los fallos, nos
aseguró, son simplemente pequeños problemas a solucionar. Cuando en sus
recortes hace una figura que no tiene forma la llama gurrumino. Y está
convencida de que todo aprendizaje requiere calentamiento y mucha práctica.
Violeta
afirma que dibujar con las manos es igual que dibujar con los dedos. Al
utilizar la cartulina además de dibujar, colorea. Combina los distintos tipos
de dibujos en sus ilustraciones. El mágico lo usa cuando utiliza algo del
exterior como ramas, telas, hojas, etc. Una ilustración requiere de trabajo,
repeticiones hasta que consigue lo que ella quiere. También tiene una parte
intuitiva porque deja hablar a sus dibujos que le van diciendo por donde seguir
y poner las cosas.
En
su faceta de escritora nos dijo que primero escribe en cuadernos y después al
ordenador, que la imaginación es fruto del esfuerzo y que le gusta colarse en
todos sus libros en forma de algún personaje. Comenzó escribiendo sobre cosas
inexistentes y después sobre cosas que pudieran servir para que los niños y
niñas crezcan mejor. Si tuviera una varita mágica dibujaría el mundo que a ella
le gusta, un mundo diferente, más bonito y bueno. En el fondo eso es lo que
intenta, cambiar las cosas que dibuja.
Está
convencida de que ser lector es tener libertad para imaginar. Es su poder
absoluto.
Violeta
nos animó a todos a afrontar nuestro trabajo mediante tres pasos para que salga
genial:
1-
Atreverse, o lo que es lo mismo, empezar a trabajar.
2-
Resistir y vencer la pereza, desechar la idea de que no va a salir y sucumbir a
las críticas.
3-
Insistir, el mismo trabajo nos pide cosas y que lo acabemos.
Al
final hubo firma de libros, también peculiar, porque Violeta personalizó en
cada uno de nuestros libros una ilustración que hace de él algo valioso y lo
convierte además en un grato recuerdo.
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